Caminar no sólo sirve para llegar de un sito a otro. Puede desencadenar otros efectos, como:
Friedrich Nietzsche decía:
«Hay que sentarse lo menos posible,
Y no creer en ningún pensamiento
Que no haya surgido al aire libre y caminando»
El filósofo pensaba que las morales sedentarias habían envenenado a la humanidad:
«Todos los prejuicios proceden de los intestinos».
2. REBELARSE
El poeta Walt Whitman andaba como «rechazo a una civilización corrupta, contaminada, alienante y miserable».
Decía que prefería una vida libre a una vida sedentaria basada en comprar cosas que acabarían en la basura.
3. BUSCAR LA BONDAD
Rousseau escribió su ‘Discurso sobre el origen de la desigualdad’ caminando por el bosque.
Andando descubrió el ‘homo viator’: el hombre que camina, «el que no está desfigurado por la cultura, la educación y las artes».
4. DISFRUTAR DE LA VIDA
Henry David Thoreau caminaba varias horas al día. «Para la economía tradicional, es tiempo perdido. No produce riqueza», escribió. «Pero, para mí, el beneficio es inmenso.
Vivir es algo que nadie puede hacer por ti. En el trabajo puede sustituirte alguien, pero no al caminar. Ese es el gran criterio».
No hay comentarios:
Publicar un comentario